EL ORIGEN DEL CHISME

EL ORIGEN DEL CHISME

Fragmento de una conversación entre Patricia Teixidor, primatóloga y George Mead Moore

Patricia: George ¿qué fue lo que inspiro a retratar a los grandes simios?

George: leí el libro de los filósofos Paola Cavalieri y Peter Singer, El proyecto Gran Simio: La igualdad más allá de la humanidad y me impacto muchísimo.

En este libro varios autores, entre ellos Jane Goodall y Richard Dawkins, presentan artículos en defensa de la idea de que, si los seres humanos son animales inteligentes con una vida social, emocional y cognitiva rica en matices, por qué no considerar como iguales a los grandes simios, que tienen vidas igualmente ricas en estos aspectos.es decir, merecen la misma consideración que los seres humanos otorgan a los miembros de su propia especie. Por todo lo anterior, quise dibujar a los grandes simios realzando sus cualidades de “personas”.

P: ¿Cómo fue tu proceso de trabajo?

G: Si comienzo del proyecto en 2006, visite algunos centros de rescate de primates en España, pero finalmente realice la mayor parte de mis dibujos en el Zoo/Aquarium de Madrid. El Zoo estaba más cerca y accesible para llegar y tuve la ventaja de conocer a un mismo grupo de animales, que permaneció constante a lo largo del tiempo; algo bastante útil en ese momento de hacer mis “retratos”.

Use un trozo de carboncillo y un bloc de dibujo como los que hacen retratos de turistas en la calle. Cada vez que un chimpancé, gorila u orangután se me acercaba, empezaba a dibujar bocetos rápidos. algunas veces ¡solo me daban unos segundos para dibujarlos! Tuve mucha suerte con los gorilas, porque tienden a ser más tranquilos. Los orangutanes presentan un aspecto más misterioso, como chamanes; el sentido original de la palabra “orangután” en malayo es “vieja persona de la selva”. Había uno que mientras le dibujaba siempre se miraba fijamente “con expresión de crítico de arte.

Los chimpancés son los peores de todos, súper traviesos, sinvergüenzas, muy inquietos. Hay que observar muchas horas para poder captarlos en un dibujo porque ¡no se están quietos! Tuve que esperar hasta una tarde soleada de primavera, cuando estaban todos sentados juntos espulgándose, para poder dibujarlos bien.

También hice algunas fotografías y dibujos en mi estudio utilizando muñecos de peluche, pero prefiero la energía de dibujar la vida real y lo mucho que se aprende de la observación directa…como se relacionan entre sí, como se mueven …sus posturas. Como dice Jordi Sabater Pi, el primatólogo y artista catalán: “para dibujar tienes que observar con mucho detalle, si observas, conoces, si conoces, estimas y, si estimas, proteges”.

P: Si, la observación directa es muy importante tanto para los artistas como para los primatólogos.

G: Si, cuando en una ocasión pude ver a los chimpancés” compartiendo” su comida tuve la sensación que toda la historia humana pasaba ante mí en un solo golpe: jerarquía, engaño, traición y, de vez en cuando, caridad. Pero luego, cuando se terminan la comida, suelen dedicarse con mucho ímpetu a empulgarse. el espulgamiento es una forma de relacionarse muy íntima, muy tierna, ¿no crees?

P: Si y resulta que el espulgamiento en los primates va mucho más allá del simple acto de quitarse los piojos o acicalarse el pelaje. Por un lado, después de muchas horas de observación, uno descubre que los animales más dominantes (como los machos o hembras de más rango) son los que reciben más empulgamiento. también parece que, cuanto más tiempo pasa empulgando a otro chimpancé, mejor te llevas con él o ella y más cosas harán por ti en el futuro.

G: me recuerda al dicho en ingles sobre la reciprocidad, que dice: “You scratch my back and I’ll scratch yours!” [Tú me rascas la espalda y yo rascare la tuya.

P: Un conocido primatólogo británico llamado Robín Dunbar sugiere que el espulgamiento es el origen del chisme o “cotilleo” en humanos. En los grupos de antiguas poblaciones de humanos no iban a pararse todo el tiempo espulgándose, y así evoluciono el lenguaje, es decir, una forma más eficiente de estrechar los lazos sociales. tanto el espulgamiento como el chisme sirven para intercambiar información y hacer nuevos amigos.